ENTREVISTA

Leynys Malavé de Díaz protegida con una coraza de amor

La primera dama del estado Nueva Esparta tiene como verbo en sus actuaciones la férrea y manifiesta creencia en la gloria de Dios.

“Cuando a uno le gusta algo y lo tiene como pasión, y no como trabajo, todo es más fácil, es el segundo mandamiento amar al prójimo como a ti mismo y lo creo por ser cristiana evangélica “, dice la esposa del gobernador Alfredo Díaz, en referencia a su trabajo diario en la agitada agenda como figura pública. Ella está entregada a servir por vocación y por devoción, le gusta tener el contacto con la gente y la posibilidad de saber dar.

- Mi día a día comienza muy temprano, soy una mujer madrugadora, pendiente de mi hogar, dejo casi todo listo antes de salir a la calle; claro, no todo el tiempo puedo preparar desayuno y mi esposo muchas veces se va y tiene que desayunar en la calle. Estamos pendientes de los niños, prepararlos para llevarlos al colegio y dejarlos a su hora fijada de clases. Es una vida normal como toda mujer, pendiente de su hogar y de su familia y cumplir desde muy temprano con visitas a enfermos, a veces debo ir a dar un pésame o cualquier actividad comprometida en la agenda.

Leynys Malavé de Díaz es una profesional del Derecho, graduada en la Universidad de Margarita, con postgrado en Derecho Procesal Penal en la Universidad Santiago Mariño. En su diaria actividad como presidenta de la Fundación Social Nueva Esparta (Funsone) destaca la organización que tiene en los días de audiencia.

Todo está perfectamente calculado por su equipo de trabajo en una primera sala de espera; posteriormente, las personas pasan a otra sala en grupo y allí la Primera Dama los espera para escuchar  de cada uno sus problemas y ofrecerles una solución. 

-¿Ha sido duro adaptarse a las nuevas responsabilidades?

 -Tengo un esposo enfocado en trabajar y servir, los dos llevamos este trabajo al frente de la Gobernación. Cuando me toca hacer otra cosa como audiencias o jornadas especiales, bien sea en la Residencia de Gobernadores o en la Fundación, lo hacemos en conjunto o  a veces separados. Somos un matrimonio muy consustanciado, cada quien tiene una agenda o un trabajo diferente, él se encarga de las obras y de la parte política, yo me encargo de la parte social del estado Nueva Esparta, para mi es más bonito conocer lo que la gente quiere con esta crisis social, ellos necesitan de unos gobernantes que los atienda y que estén muy cerca de ellos.

-¿Alguna vez se crean celos por la relevancia de ese trabajo social?

-Al contrario, mi esposo está muy pendiente, tiene una carrera política que lo ha llevado su pueblo, ellos lo eligieron para gobernar en estos momentos difíciles. A veces digo, cónchale que duro que nos haya tocado gobernar en momentos tan difíciles, sobre todo porque nos gusta dar, hacer obras, nos gusta servir, pero también digo gloria a Dios que nos tocó a nosotros y no al  anterior, aquel tenía dinero muy malo, pero imagínate ahora sin dinero lo que pudo haber sido para el pueblo de Nueva Esparta tener un gobernante tan incapaz, tan prepotente y tan inalcanzable como Mata Figueroa.  Para bendición de los neoespartanos tienen a  Alfredo Díaz.

-¡Como voy a tener celo!, -exclama Leynys de Díaz- el me apoya, me ayuda para poder llegar a la mayor cantidad de personas, es un trabajo que hace él y otro que hago yo y por eso tenemos mayor alcance en el estado.

-¿Cómo califica el trabajo de primera dama?

-La primera dama no es una figura decorativa como en años anteriores o como pasa en otros estados. Nueva Esparta tiene una primera dama que trabaja, con agenda propia y programas sociales y en definitiva tiene una agenda que cumplir basada en el beneficio colectivo, en la familia y hacia el bienestar de los neoespartanos, especialmente nuestros niños, nuestras embarazadas y nuestros adultos mayores.

-¿Algunas personas habrán pensado en su papel como activista política?

-Todo el mundo tiene un talento y yo se lo preguntaba a Dios o que me hiciera saber cuál era mi talento. Creo que mi talento es el don del servicio, lo hago con gusto y cariño, a veces voy a lugares a los que nadie se asoma con mi esposo y eso nos gusta. Vengo de una escuela en la Alcaldía del municipio Mariño, estuve ocho años como primera dama y realmente fue un campo de acción hasta donde podíamos llegar, no solamente para los porlamarenses, iba mucha gente de todo el estado y nosotros le tendíamos la mano con el mismo cariño como un porlamarense más.

-Entonces le fue fácil al llegar aquí como figura del estado.

 -Al llegar aquí fue difícil porque no conseguí una infraestructura adecuada para poder trabajar, parte del mobiliario se lo llevaron los que estuvieron anteriormente y el que dejaron estaba en condiciones deplorables. Me traje un buen equipo de trabajo,compaginé con las personas que quedaron aquí y hemos logrado hacer un trabajo hermoso, con carencias, pero hermoso a la vez, se ve en la calle, se siente que la gente se va atendida.

-¿Qué tipo de ayudas solicitan?

-Algunos vienen aquí  brindando ayudas para equipos médicos, exámenes de laboratorios, pero la gran mayoría vienen con enfermedades y estamos pendientes para hacer una jornada de medicamentos, todos sabemos lo costoso que se ha vuelto la adquisición de medicinas y el Gobernador ha dado instrucciones que todas aquellas personas que requieran algo, bien sea para mejorar su calidad de vida, hay que comprárselo cueste lo que cueste.

La función de la primera dama siempre está en la mira de la gente y en todo grupo humano hay personas agradecidas y otras responden con ingratitud. Leynys se ha dedicado a realizar su trabajo sin contemplaciones subalternas.

-Si lo hacemos para el hombre nos va a afectar esa ingratitud, pero yo lo hago para agradar a Dios, no tengo como pagarle el lugar donde me ha puesto para servirle al pueblo, ayudar al prójimo, entonces me gano mi bendición y a la vez trabajo y sirvo a nuestra gente. Soy feliz y agradecida junto a mi familia, tengo un buen esposo, entonces cómo no voy a ser feliz, lo que tú sientes es lo que muestras.

-¿Leynys es una mujer frágil o fuerte?

-Soy una mujer sencilla, tranquila y con un carácter fuerte, ese carácter fuerte se manifiesta cuando siento que me irrespetan, cuando siento que golpean a las personas. Siempre que vea algo que no me guste que no esté acorde a las buenas costumbres y en contra de los derechos humanos, yo saldré a defender, así me enseñó mi madre porque se debe cuidar lo que se tiene y no dejar que nadie te irrespete, por eso soy abogado.

-Un mensaje para las mujeres de Nueva Esparta.

-A las mujeres yo las llamo a esforzarse, a ser valientes, la mujer debe luchar, reconozco que en  estos momentos tan difíciles son las que más llevan la carga. Margarita es un estado matriarcal y estamos viviendo muchas dificultades con los niños al no poder comprarles sus artículos para ir a clases, pero las invito a que aún en la dificultad se crezcan, que crean que esto va a pasar y por favor lleven a sus hijos a la escuela o a la universidad,  el futuro de ellos va a depender de nosotros y siempre toda madre quiere que sus hijos sean mejores.

@susanamorffe

Fotos: José Ángel Moreno