El proyecto de la Universidad de Harvard busca estudiar cómo materiales lanzados a la atmósfera interactúan con la radiación solar, enfoque que podría usarse para bajar la temperatura del planeta
¿Hasta dónde llega la imaginación de los hombres de ciencia? (JAB)
El consumo de hidrocarburos en transportes es una de las principales fuentes de emisión de gases que provocan el cambio climátic
El consumo de hidrocarburos en transportes es una de las principales fuentes de emisión de gases que provocan el cambio climático
LEYRE FLAMARIQUE
El cambio climático es una realidad y los métodos para combatirlo tiran de ingenio e imaginación. El proyecto SCoPEx, liderado por la Universidad de Harvard (EE.UU.), podría considerarse uno de los más originales. El experimento se dirige a frenar en un futuro el calentamiento global anulando parte del efecto de los rayos del Sol. ¿Cómo? Con materiales lanzados a la atmósfera.
El elemento clave del plan es un globo científico. El aparato deberá primero elevarse 20 kilómetros en la atmósfera, según explican en la web de la universidad. Una vez allí, su misión consistirá en lanzar hasta dos kilogramos de carbonato de calcio gracias a las hélices con las que será equipado. Así, se crearán perturbaciones atmosféricas. De hecho, la traducción de las siglas del proyecto corresponde con “Experimento de perturbación de la estratosfera controlada”.
El carbonato de calcio ha sido elegido por sus propiedades a la hora de reflejar la luz solar y por cómo interactúa con los demás gases de la atmósfera. Además, se trata de un material que abunda en la Tierra y no resulta tóxico, aunque no existe naturalmente en la estratosfera. Una vez liberado el compuesto, el globo medirá cómo interactúan sus partículas entre sí y con la atmósfera, así como la dispersión de la luz del Sol causada por este.
El fin último de SCoPEx es avanzar en lo que se conoce como geoingeniería solar. El emergente campo supone un conjunto de tecnologías que buscan reflejar una pequeña fracción de la luz solar de regreso al espacio o aumentar la cantidad de radiación solar que se escapa de la atmósfera. De esta forma se persigue enfriar el planeta.
El futuro experimento permitirá conocer la eficacia y los riesgos de la geoingeniería solar. Se mejorará el conocimiento más allá de lo que aportan los modelos informáticos actuales o del que se puede obtener en condiciones de laboratorio. Por ejemplo, permitirá perfeccionar la capacidad de los modelos globales para predecir cómo el nuevo campo podría alterar el ozono estratosférico.
En junio de este año se lanzará previsiblemente el primer globo de prueba. La decisión final sobre el vuelo aún no ha sido tomada. Habrá que esperar hasta el 15 de febrero para conocer el veredicto, del cual se está encargando un Comité Asesor independiente.
El emplazamiento elegido para el despegue ha sido el Centro Espacial Esrange, en Kiruna (Suecia), y será gestionado por la Corporación Espacial Sueca. Esta prueba no será el experimento en sí, es decir, no se liberarán partículas. Se tratará de un test sobre el funcionamiento del globo y de la plataforma que se elevará con él para en un futuro proceder con la liberación del carbonato de calcio.
El proyecto se basa en cuatro décadas de investigación sobre la química ambiental de la capa de ozono de tres equipos de Harvard, los liderados por los profesores Frank Keutsch, David Keith y James Anderson. Si bien, fue en el año 2014 cuando los grupos dieron a conocer SCoPEx en una publicación de The Royal Society.
La universidad se asoció con la Corporación Espacial Sueca por su experiencia en el lanzamiento de globos científicos y por la disponibilidad para el verano de 2021 de trayectorias de vuelo prometedoras. Ambas entidades serán las encargadas de la supervisión inicial de los problemas ambientales, de salud y seguridad.
El cambio climático en datos
1. Las actividades humanas son la causa principal del calentamiento global de los últimos 50 años.
2. La temperatura media global de la superficie de la Tierra en 2020 empató con 2016 como el año más cálido registrado, según análisis de la NASA.
3. Según el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), es probable que el calentamiento global llegue a 1,5 °C entre 2030 y 2052 si continúa aumentando al ritmo actual.
4. Entre 2030 y 2050, la Organización Mundial de la Salud (OMS) calcula que el cambio climático causará unas 250.000 muertes adicionales cada año debidas a desnutrición, malaria, diarrea y estrés por calor.
5. Los modelos económicos y de cultivos mundiales proyectan un aumento del precio de los cereales del 1% al 29% en 2050 debido al cambio climático
6. Los costos de los daños directos a la salud se situarán entre los 1.600 y 3.000 millones de euros anuales para 2030, según la OMS.
7. Las condiciones meteorológicas extremas relacionadas con el cambio climático afectan principalmente a los países más pobres.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario